Clase 4

EJE 4: El cine como espejo. Resistir desde las imágenes.

  1. La narrativa cinematográfica del otro.
  2. La comunicación audiovisual y la cultura nacional.
  3. Estereotipos negativos y visiones del campo popular.
  4. El control de la propia imagen en el mundo contemporáneo.

Presentación de la clase

Desde el mismo momento en que el hombre ha podido capturar una imagen, hemos podido ser testigo de la historia de manera audiovisual. Pudimos “estar sin estar” en ese devenir que nos hace partícipes y actores de cada instante, aunque el espectador no tenga conocimientos específicos de técnicas y recursos cinematográficas. Es más, podemos nosotros mismos contar nuestra realidad y hacer partícipes a otros.

La importancia del cine documental en nuestra historia ha sido fundamental y fundacional, ya sea para reconocer y reconocernos en el otro, para construir subjetividades o para guardar, en nuestros oídos, la voz de quien fue y hoy ya no es.

Para comenzar este recorrido literario-audiovisual es necesario que miremos la historia reconociendo nuestras propias geografías y empezar a desandar nuestras raíces. Resulta imperioso retomar la idea de “aniquilación despiadada” que se vierte en el EJE N° 1, para poner en debate ¿qué sabemos de los Pueblos Originarios?, ¿qué nos cuentan los libros y la historia “oficial” sobre ellos? y, fundamental, ¿quiénes somos?

Para dar inicio a este recorrido, las y los invitamos a compartir este video:

Argentina: exterminio de los pueblos originarios:

Más allá de una mirada crítica de nuestro pasado, intentamos visibilizar las problemáticas sociales, históricas y culturales que, en nombre del desarrollo, han sido postergadas desde el más salvaje de los capitalismos, haciendo desaparecer culturas ancestrales y recortando las poblaciones originarias a un pequeño y minúsculo territorio habitable.

En un análisis más profundo, nos adentraremos en una pintura del autor Ángel Della Valle, “La vuelta del malón”. La obra fue exhibida en una exposición conmemorativa del IV Centenario del Descubrimiento de América, que se organizó en Chicago. El cuadro pudo verse también en Argentina; el lienzo representaba a un malón de indios con todos sus estereotipos. Se puede apreciar en él rostros desencajados, una iglesia profanada y una mujer blanca que acaba de ser secuestrada por el malón.

La representación de Della Valle no se aleja mucho de las obras europeas que reproducían a las tropillas de moros. Como corolario de un argumento de sentido y justificación simbólica del exterminio de Roca, dejando sin malones la pampa y exponiendo al indio como un enemigo ya sometido y dominado.

A continuación, proponemos mirar este video; un interesante análisis de la pintura “La vuelta del malón”:

“La vuelta del malón” – La patria a cuadros:

Tensiones: La necesidad nacional de instalar la figura de un BÁRBARO

La literatura y la cultura en Argentina han tenido la necesidad de nombrar siempre a un “bárbaro”. Poner en el eje al indio, luego al gaucho, al inmigrante, a los trabajadores y trabajadoras que han luchado y luchan por sus derechos, a los militantes… Nombra la necesidad de idear y construir a un bárbaro.

1920 no fue la excepción de esa construcción. De la lucha de trabajadores, surge una película que pasará a la inmortalidad dentro de los cánones del cine argentino. “La Patagonia rebelde” (1974) dirigida por Héctor Olivera, basada en el magistral libro histórico–testimonial de no ficción de Osvaldo Bayer, “Los vengadores de la Patagonia trágica” (dividido en cuatro tomos entre 1972 y 1974).

Vamos a compartir a continuación esta famosa y aplaudida película. No tenemos dudas que no puede quedar fuera de este recorrido. Luego, retomaremos la idea de “bárbaro”.

La Patagonia rebelde:

En esta construcción colectiva y comunitaria de la memoria, se hace indispensable el cine testimonial y documental como constituyente de la misma. Es de gran impacto emocional poder ver y escuchar a los protagonistas, testigos o descendientes directos narrar los hechos, mostrar fotos, compartir audios, documentos y todo lo que acompañe a la investigación. Repensando la idea de que la memoria es inherente al aprendizaje, debemos poner en valor algunos cortometrajes o mediometrajes de investigación. Se hace indispensable compartir este documental:

La Patagonia rebelde. Memorias del viento:

El peronismo y una pasión cinematográfica:

En este recorrido literario y cinematográfico, hemos abordado en los ejes anteriores, y como una idea tatuada a fuego en el imaginario, la figura del bárbaro. Esa ruptura recuperada en estas últimas décadas hace libre de espíritu a quienes han fundado este territorio argentino, más no los libera de las torturas y ultrajes. Es por ello, que necesitamos reencontrarnos en espacios que puedan visibilizar estas aniquiladoras prácticas y coincidir en la idea de una nación libre de violaciones a los derechos humanos.

Es menester recuperar la letra, pero también la imagen perdida del “otro”. Y ese “otro” será nombrado y reconocido en un tiempo de país asociado a una prosa afiebrada y popular.

Hugo Caamaño nos mete de cabezas en este período de la historia en el que el cine y la literatura han sido generosos, productivos, elocuentes y dice:

Oigo el bastón de Borges que se acerca

y se dirige vacilante hacia el sur.

Le perdono a él que sabe tanto

Lo que ignora con odio de nosotros.

El peronismo ha sido abordado de formas diversas en la literatura; el cine ha hecho lo propio. Recupera en sus imágenes una narrativa plebeya, inundada de barrios, y empieza a aflorar el cuerpo de esta nación. En la otredad reconocimos al albañil, al pintor, al verdulero, al militante barrial, al jornalero, y encontramos la palabra “derechos” en las voces de las mujeres. Una muestra de ello es la milonga “La descamisada” (1951), de Nelly Omar. Es una muestra absoluta de militancia y un homenaje a Eva por su incansable trabajo para reconocer los derechos de las mujeres en esa memoria crucial del desamparo.

Con la misma fuerza encontramos “El niño proletario” de Osvaldo Lamborghini en este audiolibro:

Querer escribir sobre Peronismo es volver sobre lo ya dicho, lo ya escrito. Sus escritores más populares cercanos han descrito a la perfección el devenir cotidiano de la época más debatida de la historia argentina.

En esa inagotable fuente de recursos nos encontramos con “Cabecita negra”, de Germán Rozenmacher:

Reconstruir una mirada sobre la violencia.

Un tópico ineludible es la violación sistemática de los derechos humanos durante la dictadura cívico-militar-eclesiástica entre los años 1976 y 1983. Nos encontraremos en el EJE N° 3 con sugerencias de lecturas que no están ajenas a la producción audiovisual. En la literatura universal podemos encontrar un sinnúmero de relatos que nos refieren a los derechos humanos. Franz Kafka en El Proceso narra las desventuras del señor Joseph K, quien es arrestado una mañana. En el curso del proceso judicial que se inicia en su contra no sabrá nunca de qué se lo acusa, qué derechos tiene, quiénes son sus jueces, cuál es su delito, de qué debe defenderse. El argumento se explica por sí solo: es una dilatada narración del funcionamiento de la justicia, cuyos estragos aún padecemos.

Como dice este capítulo de FILOSOFÍA AQUÍ Y AHORA, debemos “pensar por nosotros mismos”. Las y los invitamos a “repensarnos” desde Rodolfo Walsh y su compromiso como periodista e investigador:

“HAY UN FUSILADO QUE VIVE” la frase fundacional de lo que sería esta novela de “no ficción periodística” se hace ineludiblemente película:

Se puede acceder al link desde aquí: OPERACIÓN MASACRE

Este recorrido acotado de películas y documentales nos aporta herramientas de un repositorio audiovisual interminable, en el que hemos recogido algunos de esos títulos a modo de ejemplos.

Nos queremos despedir con una película del año 2010, “También la lluvia”, del director Icíar Bollaín. Como un “rezo” aparece la frase: “No te dirá la Historia lo que tienes que hacer, pero sí lo que debes evitar”. En ella se pone de manifiesto el brutal aspecto genocida de la conquista.