Globalización y Pobreza

Cuando no se tiene nada, se tienen muchas cosas

No tengo casa, 
no tengo zapatos
no tengo dinero, 
no tengo clase social
no tengo amigos,
no tengo estudios
no tengo ropa, 
no tengo oficio,
no tengo dinero ni lugar donde estar.
No tengo padre, 
no tengo madre, 
No tengo hijos, 
no tengo hermanas ni hermanos,
no tengo tierra, 
no tengo iglesia
no tengo dios
no tengo amor.
No tengo vino, 
ni cigarrilos, 
ni ropa, 
ni país, 
ni clase social, 
ni estudios, 
ni amigos. 
No tengo nada. 
No tengo dios, no tengo 
(…) 
Y no tengo mucho tiempo de vida.
Pero lo que sí tengo. 
Lo que sí tengo,. 
Déjame decirte lo que sí tengo 
y lo que nadie me va a quitar (a menos que yo quiera):
Tengo mi pelo, 
mi cabeza, 
mis venas, 
mis orejas, 
mis ojos, 
mi nariz y mi boca.
Tengo mi sonrisa; y es mi sonrisa, 
tengo mi lengua, 
mi barbilla, 
mi cuello, 
mis tetas,
mis brazos, 
mi alma y me espalda.
Tengo mi sexo!
Tengo mis brazos,
mis manos, 
mis dedos, 
mis piernas, 
mis pies, 
mis dedos de los pies, 
y mi hígado.
Tengo mi sangre. 
Tengo la vida. 
Tengo mi libertad.
Mi corazón. 
Tengo la vida!